Randall Collins utiliza los estatus para explicar porque se
produce una formación que no se resuelve. Cuando Randall Collins tiene en
cuenta el estatus, es que uno asume que lo utiliza para presumir de ello y
parecer que está a otro nivel. Con esto surge el problema de la discriminación
de género, si cada persona nos creemos que estamos a un nivel diferente, ya
estamos dando una discriminación a los que están por debajo de nosotros o por
encima. Según Collins todo lo que
hacemos es para tener poder, lo que nos interesa es el poder y tener un estatus
alto o aparentarlo. Esto hace que se produzca una diferencia con los que tienen
alto poder (por ejemplo, un rey) con los que no lo tienen y disponen de menos
riquezas, menos ventajas y menos posesiones (por ejemplo, yo). A pesar de esta
diferencia, somos dos personas iguales y porque él tenga más posesiones que yo,
no me tendría que tratar peor o discriminarme. En el ejemplo del rey, él sería
el acusado y yo sería la víctima. Por lo tanto, el que discrimina lo hace para
adquirir poder, sin importarle lo que la víctima sienta o piense. El acusado lo
que quiere es creerse superior y para ello discrimina. Finalmente, tengo que
destacar que Collins atribuía la educación como estrategia de clase para luchar
por el poder.
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